Varios miembros de un grupúsculo italiano de ultraderecha, Forza Nuova, incluidos dos responsables, fueron detenidos tras violentos choques que siguieron a una protesta contra el pasaporte sanitario en Roma, informaron medios locales.
Cientos de personas se enfrentaron la noche del sábado a la policía en el centro de la capital italiana y causaron graves desperfectos a la sede de la CGIL, la principal confederación sindical del país.
Los manifestantes protestaban contra el pasaporte sanitario que permite el ingreso a lugares públicos a personas vacunadas contra el coronavirus o testeadas recientemente.
Entre los alrededor de 10.000 manifestantes había numerosos manifestantes antivacunas y militantes del partido neofascista Forza Nuova.
Las fuerzas de seguridad utilizaron cañones de agua y gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes, en unos enfrentamientos que duraron varias horas.
«Los responsables del asalto a la sede nacional de la CGIL fueron rápida mente detenidos. Llevaban demasiado tiempo actuando para atizar las tensiones y la violencia», dijo, complacido, el diputado Federico Fornaro, informó la agencia de noticias AFP.