El Consultorio Jurídico Feminista, que asumió la querella adhesiva en representación de la víctima, espera que la justicia falle a favor de Alexa, considerando que existe el cúmulo probatorio necesario y que todas las condiciones están dadas.
“Lo justo sería una condena. Se van a cumplir cinco años del hecho, es importante que ella pueda obtener justicia y seguir con su vida de la mejor manera posible”, expresa Mirta Moragas, una de las abogadas integrante del Consultorio.
En el 2020, cuando el caso llegó por primera vez a juicio oral, quedó probado que el hecho de acoso sexual existió. Sin embargo, el Tribunal de Sentencia integrado por los jueces Leticia de Gásperi, Dina Marchuk y Hugo Segovia Villasanti, en un fallo dividido, resolvieron absolver al cura.
El fallo dictado en agosto pasado fue apelado por la querella adhesiva y el Tribunal de Apelaciones de San Lorenzo anuló la absolución y ordenó la realización de un nuevo juicio oral. La determinación de anular la absolución del párroco se basó en la errónea interpretación que realizaron los jueces Marchuk y Segovia con respecto a la palabra “hostigamiento”, fundada meramente en el significado lingüístico e ignorando la normativa internacional, así como la supuesta inexistencia de autoridad o influencia de Olmedo.
En sus argumentos el Tribunal consideró varios temas que sirven para el avance de los derechos de las mujeres: que los tribunales deben considerar los instrumentos internacionales al fallar casos de violencia contra las mujeres; que deben dejar de recurrir al diccionario cuando cuentan con otros elementos más pertinentes como instrumentos internacionales ratificados por el Estado; que un solo manoseo puede ser considerado acoso.